Ibercaja encarga a JPMorgan una ampliación de hasta 300 millones

SALDRÍA A BOLSA ENTRE 2015 Y 2016/ El grupo ya sondea a inversores extranjeros de cara a una posible ampliación y así empezar a desinvertir en su negocio bancario como establece la ley de cajas.

Ibercaja busca inversores extranjeros para su negocio bancario. La entidad aragonesa ha contratado a JPMorgan para que capte hasta 300 millones de euros en capital. Es el primer paso que da la caja de cara a salir a bolsa y desprenderse del 50% del capital de su banco, tal y como fija la última ley de cajas para las entidades que no quieran tener que constituir un fondo de reserva.

Según fuentes próximas a la operación consultadas por EXPANSIÓN, Ibercaja estaría buscando captar alrededor de 300 millones de euros y los candidatos que más suenan son los grandes fondos oportunistas, como Cerberus, TPG, Apollo, JCFlowers y Aquiline. Desde la entidad aragonesa y JPMorgan no quisieron hacer comentarios.

Esta operación todavía está en fase embrionaria. El banco de inversión, JPMorgan, ha iniciado recientemente las primeras tomas de contacto con potenciales inversores.

Todavía no está decidido si se colocarían acciones o bonos convertibles contingentes (coCos). En caso de seguir adelante la operación, Ibercaja dará entrada en su capital a inversores extranjeros con el compromiso de salir a bolsa como tarde en 2016 (ver información adjunta).

Esta operación encaja dentro de la conversión de Ibercaja en fundación bancaria, que será aprobada por su asamblea el próximo martes 17 de junio, y de la ley de cajas de ahorros que entró en vigor a finales del año pasado.

Regulación

Tras la fusión con Caja 3, Ibercaja controla el 87% de su banco, frente al 13% que está en manos de las entidades que se integraron en Caja 3: CAI, Círculo y Badajoz. Ibercaja y estas tres cajas tienen que reducir su participación conjunta en Ibercaja Banco por debajo del 50% antes de 2018. En caso contrario, las fundaciones deberán constituir un fondo de reserva para hacer frente a posibles deterioros de su negocio financiero.

Aunque fuentes cercanas a la operación aseguran que no es el caso de Ibercaja, la amplicación llega en un momento en el que muchas entidades están buscando capital parar reforzarse de cara a los test de estrés en los que ya trabajan la Autoridad Bancaria Europea (EBA, por sus siglas en inglés) y el BCE, cuyos resultados se conocerán en noviembre.

De hecho, otras de las entidades españolas supervisadas en este proceso han cerrado ampliaciones de capital recientemente, como Liberbank –aunque en este caso ha sido para devolver las ayudas públicas recibidas del Frob–, o están en proceso de hacerlo, como Cajamar.

Esta última operación tiene una estructura similar a la de Ibercaja, ya que la caja rural almeriense busca entre 300 y 500 millones de euros de inversores extranjeros, de la mano de Nomura. Esta colocación podría cerrarse en las próximas semanas.

Fuentes financieras apuntan que todavía está por ver que las cajas y los fondos oportunistas, también conocidos como buitres, sean capaces de ponerse de acuerdo en un asunto tan delicado como es una ampliación de capital. En este sentido, añaden que inicialmente ha habido algunas discrepancias en las negociaciones de la ampliación de Cajamar, ya que los “fondos exigen mucho más porcentaje del capital del que la entidad está dispuesta a dar”.

Mejora de los resultados

Ibercaja es de las pocas cajas que ha salvado la crisis sin necesidad de ayudas públicas. Absorbió el año pasado el negocio de Caja 3, que sí que tuvo un respaldo del Frob vía coCos de 407 millones y traspasó algo más de 2.000 millones en activos a Sareb.

El grupo resultante –la décima mayor entidad con 63.000 millones en activos– es de los pocos en España que no ha necesitado desinvertir en negocios para conseguir plusvalías, y mantiene por el momento el 100% de su gestora de fondos y la de sus activos inmobiliarios.

Tras dos años de pérdidas por el saneamiento financiero y por la limpieza del balance de Caja 3 –a la que dedicó dotaciones por valor de más de 400 millones en 2013–, el Grupo Ibercaja obtuvo un beneficio de 44 millones de euros en el primer trimestre del año y vio reducida su tasa de morosidad hasta el 10,9%.