La ministra de Economía, Nadia Calviño, va a crear una Autoridad Macroprudencial que vele por la estabilidad financiera. Así lo anunció ayer en su primera comparecencia en la Comisión de Economía del Congreso de los Diputados, en la que avanzó que esta semana se va a reunir el Comité de Estabilidad Financiera (Cesfi), en el que participan el Ministerio de Economía, el Banco de España y la CNMV y que no ha sido convocado desde 2013, con el fin de crear esta Autoridad. Precisamente, Calviño convocó ayer al Cesfi.
El objetivo es prevenir los desajustes que puedan afectar a la estabilidad, en especial, del sector financiero y del crédito. Se quiere prevenir las crisis y poder conjugar una agenda social, asunto en el que la ministra insistió ayer durante toda su intervención, con el compromiso de estabilidad presupuestaria. En este sentido, quiere mantener el déficit por debajo del 3%, sin asegurar que se logre el objetivo del 2,2% para este año.
Calviño afirmó que “no podemos olvidar que una de las causas de la reciente crisis fue la falta de alerta temprana ante la acumulación de determinados desequilibrios macroeconómicos”, por lo que poner en marcha una autoridad macroprudencial “se antoja fundamental para prevenir situaciones similares en el futuro”.
La creación de una Autoridad Macroprudencial es una iniciativa del G-20 que España acordó incorporar con Bruselas en el rescate financiero de junio de 2012 y que no se había abordado.
España es uno de los últimos países de la UE en contar con una institución de estas características. El Gobierno sí creó en 2013 la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal española (AIReF), organismo independiente de control fiscal cuyo objetivo es garantizar el principio de estabilidad presupuestaria y la sostenibilidad financiera del país. También a iniciativa de la Unión Europea.
El último Consejo de Ministros del Gobierno de Mariano Rajoy aprobó un Real Decreto que completa la transposición de la Directiva de 2011 sobre los requisitos aplicables a los marcos presupuestarios para controlar la elaboración de las previsiones económicas y presupuestarias del Gobierno y que sean de “calidad, realistas y no sesgadas”.
Respecto a la solvencia de España, la ministra aseguró ayer que “en este momento no hay ninguna duda sobre la solvencia de nuestro Tesoro”, y añadió que las últimas emisiones de deuda, incluida la de ayer mismo, “confirman la confianza de los inversores internacionales”.
Aun así, añadió que la deuda de hoy deberá ser pagada en el futuro y “no podemos perder de vista la carga que esto puede suponer, máxime ante la esperada subida de tipos que antes o después llevará a cabo el BCE”.
El Tesoro Público español emitió ayer un total de 4.730 millones de euros en letras a seis y doce meses, con intereses negativos.