El banco WiZink, líder en comercialización de tarjetas revolving en España, ha planteado a los sindicatos un ajuste de 210 empleados. Este recorte representa un 25% de los aproximadamente 800 trabajadores que suman WiZink España y WiZink Gestión. Esta segunda sociedad está especializada en recuperación de deudas y en dar soporte a actividades comerciales y de atención al cliente.
Queda fuera de la reestructuración la sociedad que administra el call center. El grupo tiene en total 1.350 empleados.
WiZink es un banco sin sucursales que capta los clientes vía telefónica, digital y en los stands que tiene repartidos por centros comerciales y aeropuertos.
El grupo ha esgrimido que el ajuste de plantilla responde a la necesidad de “automatizar y digitalizar” ciertos procesos y a criterios regulatorios, así como a la conveniencia de reducir duplicidades.
WiZink no pierde dinero. De hecho es el banco digital que más dinero gana en España. El año pasado registró un beneficio de 110 millones de euros .
En primavera, Värde Partners, hoy único accionista, vendió a Santander la gestión de los saldos de las tarjetas de Popular, que ascendían a 500 millones de euros, el 15% de todo el negocio de tarjetas de WiZink.
Sus clientes más rentables no eran los de Popular, sino que proceden de las carteras de tarjetas revolving (de pago aplazado) adquiridas en su día a Citi y a Barclays. Esta fórmula de financiación, que se está abriendo hueco en España, llega a cobrar un interés de hasta el 27% a los clientes.
El 49% de WiZink estaba considerado en libros la joya de la corona de Popular antes de ser resuelto. Según fuentes del mercado, Värde Partners pagó a Santander por esta participación algo más de 1.000 millones de euros.
Capta el 25% de su negocio en Portugal y en su mayor parte procede de la cartera comprada a Barclays.
En total, gestiona 3.000 millones de euros en saldos de tarjetas, productos de ahorro y cuentas corrientes, un volumen parecido a Evo Banco y algo menos de la mitad que Openbank (banco digital de Santander).
El año pasado tenía dadas de alta 4,1 millones de tarjetas y 2,5 millones de cuentas corrientes.
Salida a Bolsa
A principios de año, los fondos CVC y Cerberus mostraron interés en entrar en el capital de WiZink. Sin embargo, parece que los planes de su único accionista pasan por una salida a Bolsa, que podría producirse el próximo año, con una valoración de entre 2.000 y 3.000 millones de euros. Värde Partners ha estado sondeando a varios bancos de inversión con este propósito. No obstante, la venta a un fondo de capital riesgo no está descartada. Antes es posible que Värde busque alianzas para distribuir sus productos. Ya tiene acuerdos con Cepsa y con Globalia.