BBVA aborda un cambio estratégico en su negocio asegurador. Para ello ha fichado a Boston Consulting Group (BCG) como primer paso para reordenar este negocio a través de alianzas de bancaseguros.
El banco quiere que la consultora estadounidense analice el mercado español e internacional de seguros generales y las diferentes oportunidades y alternativas por las que BBVA puede apostar para aumentar el servicio a sus clientes y, en paralelo, optimizar el resultado de su negocio de seguros de no vida. Todo ello sin olvidar la visión digital de su negocio en la que BBVA está volcado, según la hoja de ruta fijada y trasladada a la consultora por el departamento de fusiones y adquisiciones (M&A) del banco.
Hasta ahora, BBVA se ha mantenido al margen de los grandes acuerdos estratégicos firmados entre la mayor parte de los bancos y las aseguradoras. Sí cuenta con pactos puntuales en el ramo de salud, con Sanitas, y en el de automóviles, con Liberty. En el negocio de vida trabaja con su propia filial BBVA Seguros, que controla al 100%.
América Latina
Fuera de España, el banco está presente en el mercado asegurador de México, Argentina, Colombia y Estados Unidos donde cuenta con filiales aseguradoras y brókeres de seguros.
Boston Consulting ha comenzado ya su prospección con contactos con las compañías de seguros de los diferentes mercados en los que trabaja BBVA. Cuando el banco reciba el informe de la consultora con las diferentes alternativas realizará una valoración de las opciones para entrar en la siguiente fase de esta iniciativa.
BBVA mantiene una postura estratégica alejada de las grandes alianzas de bancaseguros que han protagonizado otros grandes bancos (ver información adjunta). Pero lo cierto es que la venta de seguros en las redes bancarias se consolida cada vez más como una fuente de ingresos en un entorno complicado para ese sector, acuciado por el estrechamiento de los márgenes de su negocio tradicional.
BBVA ingresó el año pasado 133 millones de euros por la venta de seguros en sus oficinas, el 6,6% del total de comisiones del grupo.
Lo que BBVA descarta, según el plan trazado, es compartir con socios ajenos al grupo su negocio de seguros de vida, una actividad cuyas características se acercan más a los productos financieros de la banca que se integran en conjunto en la estrategia comercial de cada entidad en función de su calendario y prioridades frente a otros productos.
Antecedentes
Las alianzas de bancaseguros en el ramo de vida supusieron una vía de obtención de recursos para aliviar la delicada situación de algunas de las antiguas cajas de ahorros, hoy desaparecidas, y de otros bancos.
La crisis financiera trastocó buena parte de estos matrimonios y ha puesto en entredicho este tipo de uniones que han supuesto algo más que un quebradero de cabeza para bancos y aseguradoras, con el pago de indemnizaciones.
Por eso los expertos vaticinan que volverán a firmarse alianzas de bancaseguros, pero no con el esquema de las actuales.
Los seguros de no vida, apartado en el que se agrupan los de automóviles, salud, hogar, multirriesgos y empresas, se perfilan como los principales para las futuras alianzas. Su potencial queda reflejado en los datos de BBVA en 2017, ya que en el banco este segmento aumentó un 19,5% su volumen de primas, mientras que las pólizas de vida ahorro cayeron un 12,7% y las de vida riesgo crecieron un 4,5%.
BBVA Seguros tuvo un beneficio de 177 millones de euros en el primer semestre del año, con un aumento del 8,3% frente a la misma fecha del pasado ejercicio. Su volumen de primas total fue de 911 millones, con un recorte del 13% por la ralentización en la comercialización de los seguros de vida ahorro, debido a los tipos de interés en niveles cero que dificultan la venta de estos productos por su escasa rentabilidad.
La Llave / Página 2