Deutsche Bank prevé un ERE de 20.000 empleos

Deutsche Bank está considerando inciar un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) a nivel global para reducir entre 15.000 y 20.000 puestos de trabajo, lo que supone recortar uno de cada seis puestos de trabajo a tiempo completo en el banco, según ha adelantado Wall Street Journal.

Los despidos tendrán lugar a lo largo de más de un año y alcanzarán a todas las regiones y negocios de la entidad. Las conversaciones sobre este tema en el seno del banco tuvieron lugar entre el jueves y el viernes, pero todavía no se ha llegado a ninguna decisión definitiva al respecto.

Se trata de el primer anuncio dentro de los planes de reestructuración comunicados por Christian Sewing, consejero delegado del banco, tras el fracaso de las negociaciones de fusión con Commerzbank para crear un gigante bancario europeo. El máximo directivo señaló que el banco debería afrontar duros recortes y que estaba preparado para llevarlos a cabo.

Área de renta variable

Deutsche Bank está completando un plan para eliminar cientos de puestos de trabajo en el área de negociación de títulos de renta variable, que según Bloomberg quedará reducida a prácticamente la mitad de su tamaño. De hecho, se prevé dejar únicamente el esqueleto de esta unidad, lo suficiente para dar servicio a los clientes de banca privada del banco. Además, el área de análisis, así como en el segmento de negociación de derivados, se verán afectados.

Varios miembros de la consejo de administración de Deutsche Bank discutieron los planes por teléfono a principios de mes y llegaron a la conclusión de que también era necesario un recorte de personal a gran escala en la división estadounidense de renta variable de la entidad, así como en el negocio de tipos de interés. Sewing está tratando de convencer a los inversores de que puede darle la vuelta a la tendencia del que sigue siendo el mayor banco de Alemania. Ayer, tras el anuncio del ERE, las acciones de Deutsche Bank se anotaron el 3,32%, hasta los 6,78 euros.

Recientemente, Deutsche Bank anunció, dentro de su plan de saneamiento, que planea crear un banco malo al que trasladar 50.000 millones de activos tóxicos.