Sánchez prorroga el estado de alarma entre críticas por la falta de material

TELECONFERENCIA CON LAS CCAA/ Los presidentes regionales reprochan el déficit de suministros sanitarios y los barones del PP cargan contra la gestión de la crisis. La extensión de la alarma se votará el día 25.

El jefe del Gobierno, Pedro Sánchez, comunicó ayer a los presidentes autonómicos, con quienes mantuvo una conferencia telemática, su intención de prorrogar el estado de alarma durante al menos otros quince días, porque, tal como advirtió el propio presidente el sábado, “lo peor” de la pandemia del coronavirus en España aún “está por llegar”. La decisión inicial de decretar el estado de alarma era prerrogativa del Gobierno, que así lo aprobó el pasado 14 de marzo. Sin embargo, la prórroga de esa situación excepcional, que inicialmente vence el 29 de marzo, debe ser refrendada por el Congreso de los Diputados, que además puede delimitar su alcance y condiciones.

Así, Sánchez tiene previsto someter esta prórroga a la votación del Parlamento el próximo miércoles, día 25. Si obtiene el plácet de la Cámara, como todo apunta a que sucederá ante virulenta propagación de la epidemia, España seguirá en estado de alarma hasta al menos el próximo 11 de abril; es decir, en plena recta final de la Semana Santa.

El presidente del Gobierno comunicó esta decisión en pleno y dramático ascenso de la curva de contagios, que al cierre de esta edición ya superaban los 28.500 casos con más de 1.700 fallecidos. Sanidad estima que la pandemia podría alcanzar su pico de contagios a finales de esta semana, pero advierte de que el punto crítico para los hospitales y las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) “se producirá una o dos semanas después”. En este contexto, los presidentes de las comunidades autónomas reprocharon ayer a Sánchez de forma prácticamente generalizada la falta de material sanitario en una situación que empieza a ser dramática para muchos hospitales. El jefe de Ejecutivo anunció el sábado que el Gobierno negocia la compra de seis millones de test rápidos, así como otro material sanitario muy necesario como respiradores o mascarillas. Sin embargo, los gobiernos regionales se quejan de que, pese a estos anuncios, el material no acaba de llegar.

Las críticas más duras a la gestión de la crisis que está realizando el Gobierno central provinieron de los barones regionales del PP y, en especial, de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, la región en la que se está cebando la pandemia, con cerca de 10.000 contagiados y más de 1.000 fallecidos. La presidenta regional adelantó ayer que se ultima la salida de un avión con materiales desde China y, durante la teleconferencia, preguntó a Sánchez: “¿Puede asegurarme que no bloqueará el pedido con material sanitario de la Comunidad de Madrid preparado en Shanghái?” Díaz Ayuso ya acusó días atrás al Ejecutivo central de bloquear el material sanitario encargado por Madrid en las aduanas, algo que Moncloa niega. El presidente de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, aseguró que apenas ha llegado nada a la región tras decretarse el estado de alarma: “Los profesionales sanitarios están haciendo un buen trabajo, pero hay que ser realistas; tenemos necesidades imperiosas de material sanitario de todo tipo, de protección, respiradores, material para UCI...” Tras estas quejas, Sanidad difundió un comunicado en el que aseguraba que solo este fin de semana se han repartido 1,6 millones de mascarillas entre las CCAA. El presidente de Murcia, Fernando López Miras, fue más allá y ordenó el cese de toda actividad económica no esencial para frenar la pérdida de vidas humanas, una decisión que aún no ha tomado el Gobierno central.