Banco de España: 6 millones podrían teletrabajar

El coronavirus no solo ha puesto en jaque la globalización, sino que ha trastocado prácticamente todos los hábitos sociales y económicos, con especial énfasis en las prácticas laborales. Con la irrupción de la pandemia, el 80% de las empresas que operan en España ha impulsado el teletrabajo “con el fin de tratar de que su actividad se resienta lo menos posible en la situación actual”, señala un artículo analítico publicado ayer por el Banco de España. Sin embargo, esta modalidad laboral es una de las grandes asignaturas pendientes en nuestro país, con una tasa de teletrabajo del 7,5% de la población ocupada entre 2009 y 2018, porcentaje que ascendió al 8,3% en 2019 (alrededor de 1,6 millones de trabajadores que teletrabajaron, al menos ocasionalmente, según los datos de la EPA).

Esos porcentajes se encuentran alrededor de seis puntos porcentuales por debajo del promedio europeo y aún más alejados de las cifras que alcanzan otras grandes economías de la región, como la francesa, donde el 20,8% de su población trabaja telemáticamente. En Alemania, el porcentaje era del 11,6%, aunque curiosamente esta fórmula fue perdiendo peso en el sistema productivo germano en la década comprendida entre 2009 y 2018, periodo del que se dispone de datos homogéneos en la UE.

El informe considera que alrededor de un 30% de los ocupados españoles podría teletrabajar; esto es, en torno a 6 millones de personas frente a los 1,6 millones que lo hacían antes del inicio de la epidemia, por lo que “aún existe un amplio margen de mejora en el uso de esta modalidad de trabajo”, señala el documento. Es el porcentaje en el que ya se mueven en la actualidad Países Bajos o Suecia, donde más de un 30% de sus ocupados “desarrollan su actividad laboral a distancia”. Pese al elevado potencial que existe en España, la institución advierte de que éste no es asimétrico, ya que los trabajadores con menor nivel educativo tendrán “dificultades para poder beneficiarse de esta forma de trabajar”.

El colectivo que más recurre al teletrabajo es el de los autónomos, algo que no es de extrañar, según el Banco de España, ya que en muchos casos su domicilio habitual es también su lugar de trabajo. En este sentido, las empresas pequeñas son las que más usan el trabajo telemático, lo que, según los autores del informe, “está relacionado con el autoempleo”. Entre los asalariados, las compañías más proclives a esta fórmula son las medianas, aunque en los últimos años “las empresas más grandes han ido incrementando su participación en el teletrabajo”. Donde, según el Banco de España, existe mayor potencial de mejora es en los sectores de transporte y el almacenamiento; el suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado; la Administración Pública; el comercio; el suministro de agua, las actividades de saneamiento y la gestión de residuos.