El PIB de España sufre el segundo mayor desplome de la eurozona

PRIMER TRIMESTRE/ Con sólo 15 días de parón entre enero y marzo, la economía española cae un 5,2%, un hundimiento histórico sólo superado por Francia, que pierde un 5,8% del PIB.

La crisis del coronavirus ha agujereado las economías europeas, que ya empiezan a sangrar, y la herida abierta en España es de las de peor pronóstico. La economía española se hundió un 5,2% en el primer trimestre, respecto a los últimos tres meses de 2019, protagonizando el segundo peor dato de la eurozona. Sólo Francia sufrió un desplome mayor entre las economías del euro, del 5,8%, según publicó ayer Eurostat.

“Europa está viviendo un shock económico sin precedentes desde la Gran Depresión”, explicó ayer el comisario europeo de Finanzas, Paolo Gentiloni. El impacto económico ha sido generalizado, al coincidir el parón en la demanda externa con una respuesta similar por parte de todas las economías europeas: cuarentena y parálisis de actividad. Como consecuencia, el PIB de la eurozona cayó de media un 3,8% y el empleo un 0,2% entre enero y marzo. Se trata de la primera caída en el empleo desde el segundo trimestre de 2013 en el caso de la eurozona y desde los primeros tres meses de 2013 para la UE, en plena crisis. El cierre masivo de negocios anunciado por toda la Unión ha provocado una oleada de despidos temporales y una erosión de rentas que, de no recuperarse, podrían instalarse en los registros futuros del paro.

En la Unión Europea, el descenso del PIB fue del 3,3% respecto al último trimestre de 2019. Ambas son las bajadas más acusadas desde que Eurostat comenzó a publicar las series de contabilidad en 1995, y ponen fin a un ciclo expansivo que ya empezaba a dar sus últimos coletazos a finales de 2019, con subidas de apenas un 0,1% en la zona euro y del 0,2% en la UE. En tasa interanual el PIB bajó un 3,2% y un 2,6% respectivamente.

Además de Francia y Alemania, Italia, el primer país en sufrir el colapso sanitario, experimentó una caída del 4,7%.

En Alemania, donde el control sanitario de la pandemia permitió iniciar la desescalada hace algunas semanas, la caída fue del 2,2%, mientras que en Reino Unido, aunque ya fuera de la unión, del 2%.

Pese a tratarse de un hundimiento histórico, estos registros apenas recogen el impacto de la pandemia en sus primeros 15 días (la última quincena de marzo). La caída libre de España, por ejemplo, supera con creces el –2,6% sufrido en el primer trimestre de 2009 tras la quiebra de Lehman Brothers.

El parón de actividad decretado para contener la propagación de la pandemia eclipsó la buena marcha del PIB de los primeros meses del año, pero el confinamiento de la población española y la actividad al ralentí han continuado durante todo el mes de abril y, por lo menos, medio mes de mayo, a lo que se sumará un verano catastrófico para uno de los sectores más importantes para la economía, el turismo, por lo que cabe esperar un segundo trimestre todavía peor. El Gobierno, de hecho, descuenta un desplome del 18,2% para la primera mitad del año, y aunque espera que la recuperación empiece a asomar en el tercer trimestre, no será suficiente para mitigar una caída del 9,2% prevista para 2020.

Si se analizan los datos de los 27, la caída de España es la tercera más elevada, ya que habría que incorporar el descenso del 5,4% de Eslovaquia. “Es uno de los tres o cuatro países más afectados en Europa por la pandemia, necesita solidaridad”, dijo sobre España Gentiloni, y añadió que “no es habitual que la Comisión Europea invite al gasto a los Estados, pero las consecuencias de no intervenir habrían sido peores que tener déficit y deuda”.

En sus previsiones de primavera publicadas a principios de mayo la Comisión ya adelantó que la crisis del coronavirus tendrá un importante impacto en los estados miembro. En el caso de España calculó una pérdida de PIB del 9,4% y una subida del paro al 18,9%.