La Fundación La Caixa está adaptando y reorientando sus proyectos de cooperación internacional para abordar la crisis del coronavirus en los países de África, Asia y América Latina en los que tiene presencia, y en particular a través de Work4Progress (W4P), el programa pionero que promueve la innovación y la creación de empleo de calidad para mujeres y jóvenes vulnerables de India, Mozambique y Perú.
Con la llegada de la pandemia a estos países, los esfuerzos se concentran en el apoyo a los pequeños negocios generados en el marco de este programa, tanto para adaptarse al nuevo contexto, como para contribuir a ofrecer productos y servicios de primera necesidad. Las plataformas de creación de empleo establecidas y los propios negocios en los últimos tres años, se están adaptando a las nuevas necesidades en base a un marco 3R: respuesta, reestructuración y re-imagen.
Prototipos
Los prototipos se encuentran actualmente en la etapa de respuesta en la que abordan las necesidades inmediatas de las comunidades y trabajan simultáneamente en la reestructuración de su diseño con socios para ofrecer soluciones relevantes tras la pandemia.
En India, en las regiones de Bundelkand y Eastern Uttar Pradesh, por ejemplo, los resultados de un ejercicio de escucha con más de 100 microempresarios vinculados al programa W4P durante el cierre nacional, dieron una idea de las formas en que las comunidades W4P se están adaptando a la pandemia. Entre ellas, microempresas de e-rickshaws dirigidas por mujeres, empresas de sastrería o iniciativas de microcrédito.
En la región de Quispicanchi (Perú), los equipos están trabajando en adaptaciones de los emprendimientos productivos para hacer frente a la pandemia y, especialmente, a la etapa pos-Covid. En Mozambique, los socios de W4P están contribuyendo a los esfuerzos de contención del coronavirus, diseminando las medidas de prevención en las intervenciones y sensibilizando a la población sobre su importancia.
Colaboración
Iniciado en 2017, el programa Work4Progress de la Fundación La Caixa cuenta con un presupuesto anual de 2,6 millones de euros, hasta mayo de 2020. Está presente en esos tres países con una red de 35 organizaciones sociales implicadas, lideradas en cada región a través de una entidad referente: Perú, en las zonas de Condorcanqui (Amazonas) y Quispicanchi (Cusco), junto a la organización Entreculturas; Mozambique, en Cabo Delgado y Maputo, con Ayuda en Acción; e India, en Bundelkhand y Eastern UP (Uttar Pradesh), con Development Alternatives.