Unespa, la patronal aseguradora, trabaja para conseguir que la subida del impuesto a las primas de seguros tenga un periodo de adaptación de varias semanas.
El proyecto de los Presupuestos Generales del Estado para 2021 incluye entre sus novedades el aumento del 6% al 8% del impuesto que se carga en las pólizas de buena parte de los seguros y que corre a cargo, por tanto, de los usuarios.
Muchos contratos se renuevan anualmente a final de cada ejercicio. Por eso, ahora en las últimas semanas del año, las compañías remiten a sus clientes la comunicación de que recibirán la nueva póliza en breve con la indicación del precio a pagar.
Las aseguradoras alegan que en esta documentación no pueden ofrecer el precio real, ya que no refleja el nuevo impuesto incluido en los Presupuestos, que se tramitan en el Parlamento.
Además, añaden en el sector, la subida del impuesto debe incluirse en los programas informáticos de las entidades para gestionar sus pólizas y esto no es aconsejable hacerlo hasta que los Presupuestos entren en vigor para evitar posibles imprevistos y al final, por ejemplo, el aumento sea diferente al propuesto.
Por estas dos circunstancias, desde Unespa negocian con los grupos parlamentarios para conseguir una enmienda a los Presupuestos con un plazo de adaptación de dos meses a contar desde el día en que entren en vigor los nuevos Presupuestos, algo que está previsto para las primera semanas del próximo año.
El impuesto a los seguros se aplica en las pólizas de coche, hogar, defensa jurídica y responsabilidad civil. Quedan fuera de esta órbita las pólizas de salud, crédito, caución y las de vida ahorro.