Después del annus horribilis que supuso 2009, el turismo español recupera fuerzas poco a poco. El año pasado consiguió crear 10.000 empleos e ingresó 52.000 millones de euros, y el propio presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, aseguró hace dos semanas que se están ultimando los flecos del nuevo Plan Integral para el sector, que representa el 10% del PIB nacional. Uno de los ingredientes del Plan es la concesión de préstamos a las pymes turísticas a través del Instituto de Crédito Oficial (ICO), tal como ha podido saber este periódico. La medida podría beneficiar a medio millón de compañías.
En concreto, la secretaría de Estado de Turismo, dirigida por Isabel Borrego, prepara dos líneas concedidas por el organismo financiero público: una destinada a "jóvenes emprendedores" y otra a pequeñas y medianas empresas. Ambas partidas se sumarían a las cinco anunciadas el pasado viernes tras el Consejo de Ministros, que suman un valor total de 22.000 millones de euros y pretenden reforzar la adquisición de bienes de equipo, la internacionalización, la actividad de los emprendedores, la mejora de liquidez y la rehabilitación de viviendas.
Representantes de la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (Cehat), principal patronal del sector, se reunieron recientemente con Borrego para explicar sus peticiones de revitalización económica. La principal es la siguiente: "Para 2012, destinar 2.500 millones de los 23.000 millones de euros anuales en préstamos de mediación", justificados por "la contribución del turismo al PIB del país", según el documento presentado a la dirigente. Fuentes del Ministerio de Industria, Energía y Turismo aseguran que, efectivamente, el Gobierno pretende facilitar una línea ICO para "la modernización de las pymes turísticas", pero que la dotación estará "muy lejos" de la planteada por Cehat.
Cuantías aparte, las solicitudes que recibió Borrego para el turismo son las siguientes: que el ICO asuma el 50% del riesgo de las inversiones, que los beneficiarios sean tanto pymes como empresas grandes, que el préstamo cubra el 100% de la inversión, que se mantengan los conceptos financiables ya incluidos en las anteriores líneas ICO FuturE de 2009, 2010 y 2011; la posibilidad de ampliar plazos de amortización a 20 años (los mencionados préstamos debían devolverse en 12 años) y un tipo de interés "atractivo para no exigir demasiada rentabilidad a las inversiones y conseguir el efecto incentivador".
Los hoteleros tachan de "fracaso" tanto los préstamos FuturE como el Plan Renove que el Gobierno socialista lanzó en los últimos tres años. A su juicio, la "aversión al riesgo" de las entidades financieras "les lleva a solicitar más garantías y avales, que el empresario en muchos casos no puede aportar". También atribuyen los malos resultados al "caro" tipo de interés ofrecido (en 2011 era del 6,6%, frente al 1,5% ofrecido en 2009) y a los "conceptos financiables cada vez más restrictivos, dejando fuera la propia modernización de equipamiento y mobiliario".
Antigüedad
Como argumento para recibir créditos públicos, Cehat invoca el "alto porcentaje de la planta hotelera española con una antigüedad superior a los veinte años, compitiendo con las nuevas instalaciones de los países emergentes de los Mediterráneo". Y no cree que los créditos públicos deban cubrir una inversión mínima de dos millones de euros (como sucedió con las líneas de 2009 y 2010) o de 20 millones (así se estableció en 2011), sino que "cualquier inversión pueda ser financiable".
Según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) a fecha de 29 de diciembre de 2011, en España hay 460.788 pequeñas y medianas empresas relacionadas con el sector. Éstas afrontan un 2012 de leve crecimiento: la asociación Alianza para la Excelencia Turística (Exceltur) cree que la actividad sectorial crecerá un 0,2%.
Editorial / Página 2